Miercoles, 29 enero 2025
De acuerdo con cifras del IMSS 75% de los mexicanos viven con altos niveles de estrés y 19.5% padecen ansiedad severa
Estos trastornos pueden afectar el desempeño laboral y las relaciones interpersonales.
Según el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), más del 75% de los mexicanos enfrentan niveles moderados o altos de estrés, lo que ha generado una creciente preocupación por la salud mental en el país. Asimismo, el 19.3% de la población mexicana padece ansiedad severa, mientras que más del 30% experimenta ansiedad leve o moderada, situándolos entre los trastornos más prevalentes de salud mental.
El estrés, definido como una respuesta natural ante situaciones desafiantes, puede ser útil en niveles moderados, ya que motiva a las personas a alcanzar metas. Sin embargo, cuando se vuelve excesivo o crónico, impacta negativamente en la salud, provocando problemas como dolores de cabeza, insomnio, trastornos digestivos y enfermedades cardiovasculares. Por otro lado, la ansiedad, caracterizada por una preocupación constante y desproporcionada ante situaciones inciertas, puede desencadenar trastornos graves como ataques de pánico y ansiedad generalizada.
De acuerdo con la Dra. Cynthia Vega, directora de Relaciones Médicas de PiSA Farmacéutica, “factores como el tráfico, la inseguridad, la presión laboral, las dificultades económicas y los cambios de vida, como mudanzas o pérdidas personales, han contribuido al aumento de los niveles de estrés y ansiedad en México.”
Las consecuencias de estos trastornos no solo afectan la salud física, sino también el desempeño laboral y las relaciones interpersonales. En el ámbito profesional, el estrés puede generar baja productividad y conflictos, mientras que en el plano personal, puede provocar tensiones familiares y aislamiento social.
¿Cuál es el tratamiento para estrés y ansiedad?
Para contrarrestar los efectos del estrés y la ansiedad, es crucial adoptar un enfoque integral que incluya tanto tratamientos médicos como estrategias de autocuidado. “Hablar con profesionales de la salud mental y adoptar hábitos saludables como la relajación, el ejercicio y una dieta equilibrada son fundamentales para manejar estas emociones de manera efectiva”, afirma la Dra. Vega.
Recientemente, el eje intestino-cerebro ha cobrado relevancia en el ámbito científico, destacando el papel de la microbiota intestinal en la salud mental. Los probióticos, al equilibrar la microbiota, se han posicionado como aliados clave para reducir síntomas de estrés y ansiedad. “Ciertas cepas de probióticos pueden ayudar a mantener el equilibrio intestinal, donde se produce la serotonina, un neurotransmisor esencial para regular el estrés”, agrega la especialista.
Con más del 75% de los mexicanos experimentando fatiga relacionada con el estrés laboral, y con un alto porcentaje de la población afectada por ansiedad, es urgente generar conciencia sobre la importancia de cuidar la salud mental. Adoptar tratamientos complementarios, como el uso de probióticos bajo supervisión médica, podría ser un paso importante hacia la mejora de la calidad de vida, señala la especialista.
El bienestar integral es fundamental para una vida plena. Abordar eficazmente el estrés y la ansiedad no solo beneficia a las personas individualmente, sino que también contribuye a prevenir enfermedades crónicas y fortalece el bienestar de la comunidad en su conjunto.
